Una familia compuesta por dos adultos y dos menores necesitó $1.033.716 para no ser pobre en enero de 2025, indicó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). El dato de la Canasta Básica se conoció en simultáneo con el índice de inflación del primer mes del año, que fue de 2,2%, el más bajo desde julio de 2020.
La Canasta Básica Total, que se usa para estimar la pobreza, registró así un aumento del 0,9% con respecto al valor de diciembre. La variación interanual llega a 73,2%.
Por otra parte, una familia precisó $453.384 para no ser indigente. La Canasta Básica Alimentaria mostró una suba de 0,9% con respecto diciembre y un salto interanual de 58,8%.
En diciembre de 2024 una familia había necesitado $1.024.435 para no ser pobre, mientras que en noviembre del mismo año había necesitado $1.001.466 para no caerse de la línea de pobreza y $434.620 para mantenerse por encima del umbral de la indigencia. La suba mensual había sido del 2,3%.
La Canasta Básica Total (CBT), además de alimentos, incluye varios puntos del gasto de los hogares, como indumentaria, salud, transporte o educación, lo que determina la línea de pobreza. En tanto, la Canasta Básica Alimentaria (CBA) releva solamente bienes de primera necesidad y establece la línea de indigencia.
La canasta básica por grupo familiar
El número oficial del Indec toma en cuenta familias de cuatro integrantes (dos adultos y dos menores). Por lo tanto, para grupos de dos, tres o más de cuatro, el número es diferente y debe calcularse de acuerdo a la estimación individual que también da a conocer el Indec en el mismo informe.
El adulto equivalente, la unidad que utiliza el organismo para las estimaciones, necesitó $334.536 para no ser pobre y $146.726 para no ser indigente.
Así, un hogar de tres integrantes precisó $822.958 para cubrir la Canasta Básica Total y $360.947 para la Canasta Básica Alimentaria. Una familia de cinco miembros, por su parte, necesitó $1.087.241 y $476.860, respectivamente.
La CBA se determina tomando en cuenta los requerimientos de nutritivos imprescindibles para que un varón adulto de entre 30 y 60 años, de actividad moderada, cubra durante un mes esas necesidades (adulto equivalente). A su vez, el organismo oficial de estadísticas públicas utiliza una canasta de consumo de la población a partir de la información provista por la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENGHo). Para determinar la CBT se amplía la CBA considerando los bienes y servicios no alimentarios. La estimación se obtiene mediante la aplicación del coeficiente de Engel (CdE), definido como la relación entre los gastos alimentarios y los gastos totales observados en la población de referencia.