La empresa de biotecnología e ingeniería genética Colossal Biosciences aseguró haber dado un primer paso hacia la "desextinción", al anunciar que sus científicos lograron traer de vuelta a la Tierra tres ejemplares de lobo terrible, una especie de cánido de gran tamaño extinguida hace unos 10.000 años.
Rómulo y Remo nacieron en octubre pasado y homenajean con su nombre a los hermanos gemelos fundadores de Roma que, según la leyenda, fueron alimentados y criados por la loba Luperca. El otro ejemplar se llama Khaleesi, en referencia a los huargos de la novela "Juego de Tronos", que retoma la mitológica criatura de las historias fantásticas nórdicas. Los tres viven en una reserva ecológica ubicación en algún lugar secreto.
De esta manera, Colossal Biosciences estaría en camino de comenzar a desarrollar su proyecto más ambicioso: "desextinguir" al mamut lanudo en 2028.
Pero, pese a la presentación de la empresa de ingeniería genética —que publicó un extenso artículo de portada en la revista Time—, Rómulo, Remo y Khaleesi no son exactamente una resurrección de los lobos terribles sino que se trata de lobos grises modificados genéticamente para parecerse fenotípicamente. Los científicos detrás de este logro bautizaron la técnica como “desextinción funcional”.
Embed - https://publish.twitter.com/oembed?url=https://x.com/lacapital/status/1909354849134952806&partner=&hide_thread=false
El Aenocyon dirus, conocido como lobo terrible o lobo gigante, vivió en el Pleistoceno tardío (129.000 años a.C. hasta 9.700 a.C.) para extinguirse hace unos 10.000 años, aunque algunas teorías señalan que quizás haya habido ejemplares hasta hace unos 4.000 años. Se encontraba desde América del Norte hasta la Pampa argentina y eran más grandes que el promedio de los actuales lobos grises, y con dientes más grandes y robustos.
Colossal Biosciences hizo ahora una "recreación" de lobos terribles combinando edición genética y perros sustitutos. Los tres ejemplares nacieron por separado de madres sustitutas, mestizas de sabuesos grandes. Según indicaron, incluyen ADN copiado de un diente de 13.000 años y de un cráneo de 72.000 años.
Es decir, editaron el ADN de células de un lobo gris para que se parecieran a las variantes encontradas en sus muestras de lobos terribles. Los embriones resultantes fueron implantados en perras mestizas.
Aún así, Colossal Biosciences aseguró que su análisis del genoma del lobo terrible es el más completo hasta la fecha. “No podría estar más orgulloso del equipo. Este hito monumental es el primero de muchos ejemplos que demuestran que nuestra tecnología de desextinción de extremo a extremo funciona”, dijo el CEO de Colossal, Ben Lamm, en un comunicado.