El padre de María Cash, la joven diseñadora de ropa porteña que desapareció en julio de 2011 en la zona norte del país, murió al accidentarse con su auto en ruta provincial 152 de La Pampa mientras seguía una pista para dar con el paradero de su hija.
Desde la División de Accidentología confirmaron ayer a Télam que Federico Carlos Cash, de 70 años, viajaba en un Peugeot 207 color blanco que impactó contra un Renault Clío. La policía informó que la colisión se produjo anteayer a las 17.30 en la ruta provincial 152, a la altura del kilómetro 183, a dos kilómetros de Puelches, cuando uno de los autos se cruzó de carril.
El Clío era conducido por una mujer de 50 años, de apellido Geivinasso, que viajaba acompañada por su esposo desde la ciudad de Buenos Aires hacia el sur del país. La policía destacó que se investiga cuál de los autos se cruzó de carril y originó el fuerte impacto frontal que terminó con la vida de Cash, quien debió ser rescatado entre los hierros dentro del auto. En tanto, el matrimonio sufrió lesiones que obligaron a su derivación al Hospital Padre Buodo, de General Acha, donde los profesionales revelaron que se encuentran bien y fuera de peligro, aunque permanecen en observación.
"En ese lugar, el auto conducido por Cash, un Peugeot 207 de color blanco, se estrelló de frente contra otro vehículo", confirmó el oficial Jorge Fernández, de la comisaría de Puelches. Fernández dijo que Cash murió en el acto, mientras que la conductora del otro vehículo sufrió heridas leves.
Según el abogado de la familia, Víctor Barone, el hombre tenía como "trabajo constante la búsqueda de su hija". Barone señaló que "el trabajo habitual de Federico, desde hace 34 meses a la fecha, era la búsqueda de su hija", por quien "dejó su vida". "El hizo mucho por encontrar a María y por mucha gente desaparecida, en medio del calvario que le tocó vivir. Porque él nunca dejó de buscar a su hija", expresó el letrado. Asimismo, destacó que en la lucha por encontrar a su hija, Cash "presentó un proyecto para crear la Agencia Nacional de Búsqueda de Personas, encontró otras tantas chicas desaparecidas y motivó que hoy estemos hablando una oficina para la búsqueda de la Corte Suprema de Justicia". "Lo único que hizo en estos 34 meses fue buscar a su hija, al pájaro que le faltaba en el nido, como decía él", acotó.
María Cash, de 29 años, desapareció el 4 de julio de 2011 cuando viajó a Jujuy para vender ropa que había diseñado, pero según la investigación no llegó a destino porque bajó del colectivo que la trasladaba unos 200 kilómetros antes, en Rosario de la Frontera, Salta.
Siguiendo todo tipo de pistas sobre el posible paradero de su hija, en los últimos años Cash recorrió distintas provincias. En medio de su búsqueda "había recibido amenazas telefónicas, un tema bastante desagradable", dijo el abogado, quien también expresó que el hombre prestaba atención a todas las llamadas pese a que "muchas veces tenían pistas falsas". "Sé que la familia quiere despedir al jefe de su familia en paz y que después van a volver a tomar la posta que dejó Federico. Nunca dejaron de buscar a María", opinó Barone. Federico Cash viajó varias veces a Salta para conseguir datos y contactarse con el Juzgado Federal 2, que lleva la causa. El 21 de marzo volvió a esa ciudad para interiorizarse sobre el avance de la causa y participó en la marcha de los viernes de la Comisión de Familiares contra la Impunidad, en la plaza 9 de Julio, donde se mostró crítico con el sistema judicial."Llegué a la conclusión de que no hay una entidad que centralice, coordine la búsqueda y actúe. No hay tecnología para hacerlo. No están equipados", dijo en la prensa de Salta.
Por su parte, el titular de la ONG Red Solidaria, Juan Carr, sostuvo que la última información que tenía, de cuatro días atrás, es que "Federico estaba buscando a su hija en San Carlos de Bariloche". "Hay muy pocas bromas, generalmente la gente es buena. La gente cree ver muchas Marías y él iba a todos lados", reseñó el dirigente social.
María Cash tomó contacto por última vez con su familia el 8 de julio de 2011, y desde ese día se investiga su desaparición, nunca esclarecida. La joven había iniciado un viaje hacia Jujuy el 4 de julio de 2011, y tenía pensado además visitar a un amigo, Juan Pablo Dumon. La investigación indica que estuvo en el pasaje Aunor, en el acceso a la ciudad de Salta, y que luego hizo dedo para dirigirse al sur.
Por su parte, el gobierno de la Nación ofrece una recompensa de 400 mil pesos para quienes aporten datos certeros sobre el paradero de la mujer, mientras que existe una línea gratuita, la 0800-888-8804, que recibe noticias sobre el caso las 24 horas.