El papa Francisco continúa recuperándose de su neumonía bilateral, pero no pierde el tiempo y continúa con su agenda en el hospital. A pesar de rechazar a Juan Grabois, el sumo Pontífice recibió al cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano.
La reunión con el cardenal sirvió para aprobar nuevos decretos de santidad y convocar un consistorio para fijar fechas de canonización. “El Papa sigue tomando decisiones importantes para la Iglesia, lo que demuestra que la maquinaria vaticana sigue funcionando”, señaló la Santa Sede en un escueto comunicado.
Además de Parolin, también se encontró con el jefe de gabinete del Vaticano, el arzobispado Edgar Peña Parra, para aprobar la beatificación de cinco personas, la canonización de otras dos, nombrar nuevos obispos en Brasil y Canadá y modificó leyes internas del Vaticano para darle más autoridad a Sor Raffaella Petrini.
El papa está hospitalizado desde el 14 de febrero en el Hospital Gemelli de Roma. Este martes volvió a tener un descanso pleno, según comunicó el Vaticano.
Francisco, de 88 años, mostró una ligera mejoría en su estado de salud, sostuvo el último comunicado médico del sanatorio emitido el lunes.
A pesar de la evolución favorable, Francisco continúa recibiendo oxigenoterapia, aunque los médicos redujeron la cantidad de oxígeno administrado en comparación con días anteriores. La Santa Sede también informó que el Papa presenta una leve insuficiencia renal, aunque aclararon que esta condición "no es preocupante" y se mantiene bajo control.
La evolución del papa Francisco
El domingo, Francisco se dirigió a los fieles mediante un mensaje grabado para el tradicional rezo del Ángelus. En sus palabras, expresó su gratitud por las muestras de apoyo recibidas y pidió a los creyentes que "no dejen de rezar" por su pronta recuperación. Fue la segunda vez en este mes que el pontífice no pudo aparecer en público debido a su estado de salud.
Desde el Vaticano confirmaron que el Papa Francisco está siendo atendido por un equipo multidisciplinario de especialistas que monitorean su evolución de forma permanente. Si bien la recuperación avanza lentamente, el portavoz de la Santa Sede subrayó que "se mantiene un pronóstico reservado" y que cualquier novedad será comunicada de manera oficial.
Francisco, de 88 años, fue hospitalizado el pasado 14 de febrero por una bronquitis con infección polimicrobiana a la que se sumó una neumonía bilateral.