El periodista Jorge Lanata continúa internado en estado delicado tras ser operado en reiteradas ocasiones durante los últimos días. Mientras tanto, la saga que confronta a su esposa, Elba Marcovecchio, con sus hijas ahora sumó a una nueva protagonista: Sara Stewart Brown, la ex pareja del conductor.
Este jueves, Stewart Brown reveló, a través de un posteo en su cuenta de X, que cuenta con un poder "recíproco, irrevocable e inextinguible" firmado de común acuerdo con Lanata.
Haciendo uso de este mecanismo, decidió retrotraer algunas decisiones que tomó Marcovecchio, como el despido de algunos empleados que acompañan al periodista desde hace varios años.
El periodista había contraido matrimonio en secreto con Sara Stewart Brown en el 2011, su pareja desde hacía 15 años.
Jorge Lanata contrajo matrimonio, en secreto, con Sara Stewart Brown en el 2011. Fueron pareja durante 19 años.
"Con Lanata tenemos un poder recíproco, el más amplio que pueda existir, que incluye la facultad de revocar otros poderes, en especial con cláusula de irrevocabilidad o inextinguibles para el caso de incapacidad o fallecimiento", comienza el escrito de Stewart Brown, que le donó un riñón a Lanata para salvarle la vida.
La carta de la ex esposa de Jorge Lanata
La ex esposa del conductor resaltó que "así dice expresamente el poder" y continuó: "Nos lo otorgamos mutuamente y lo mantuvimos vigente por la confianza que siempre nos tuvimos y tenemos en la actualidad".
Stewart Brown tomó la decisión de usar ese poder para "revocar un poder en particular" porque, según aseguró: "Ese poder que revoqué se estaba usando para hacer cosas que Lanata jamás hubiera hecho, contra personas a las que jamás hubiera perjudicado. Por lo que dejé sin efecto legal".
>> Leer más: La justicia ordenó que la hija mayor de Jorge Lanata pueda decidir sobre la salud del periodista
"Tengo la certeza que Lanata no estaría de acuerdo de que la gente que lo acompaño fiel y amorosamente por más de 20 años, y que ya son parte de su familia, se queden sin cobrar su sueldo, incluso aunque una ley se lo permita. Lanata no piensa ni actuó jamás de esa forma. Conozco a Lanata desde hace 28 años, pasamos 19 de esos años juntos y construimos una relación de mucho amor, respeto y confianza, que se extendió más allá de nuestra separación acompañando las decisiones de cada uno", continuó.
"Él es un hombre valiente y fiel a sus convicciones que siempre protegió y defendió a sus hijas y no permitiría jamás que alguien les haga daño. Teniendo un poder mutuo y sabiendo que él haría lo mismo que yo en una situación como esta, no puedo hacerme la distraída. Me sentí obligada por las circunstancias a intervenir. Lo hice todo en regla, con la intervención de un escribano e informándose a la Justicia de manera inmediata", concluyó.