Los dos astronautas de la Nasa varados en la Estación Espacial Internacional, cuyo viaje inicial debía durar tan solo una semana, están a punto de regresar finalmente a la Tierra tras pasar nueve meses en el espacio.
Butch Wilmore y Suni Williams aún deben esperar hasta fin de mes para volver a la Tierra
Butch Wilmore (izq.) y Suni Williams (der.) regresarían a la Tierra antes de fin de mes.
Los dos astronautas de la Nasa varados en la Estación Espacial Internacional, cuyo viaje inicial debía durar tan solo una semana, están a punto de regresar finalmente a la Tierra tras pasar nueve meses en el espacio.
Butch Wilmore y Suni Williams deben esperar hasta que sus reemplazos lleguen a la Estación Espacial Internacional la próxima semana antes de que puedan salir a finales de este mes.
Se les unirán en su viaje de regreso con SpaceX dos astronautas que viajaron por su cuenta en septiembre, junto a dos asientos vacíos.
En una conferencia de prensa realizada el martes, Wilmore afirmó que, aunque la política es parte de la vida, no influyó en su regreso ni en el de Williams, que se adelantó un par de semanas gracias a un cambio en las cápsulas de SpaceX. El presidente Donald Trump y Elon Musk de SpaceX dijeron a finales de enero que querían acelerar el regreso de los astronautas, culpando a la administración anterior.
Sin embargo, Williams expresó su desacuerdo con la reciente propuesta de Musk de deshacerse de la estación espacial en dos años, en lugar de esperar hasta su desorbitación, programada por la NASA para 2031. Destacó toda la investigación científica que se realiza en el laboratorio en órbita.
“Este lugar está funcionando. Realmente es asombroso, así que, en mi opinión, estamos en nuestro mejor momento”, dijo Williams, que estuvo en la estación espacial en tres ocasiones. “Pienso que, probablemente, este no sea el momento adecuado para rendirse y dar por terminado el asunto”.
Williams dijo estar impaciente por reunirse con sus perros labradores. Agregó que la parte más difícil de la estancia, que se prolongó inesperadamente, fue la espera de sus familiares en casa. “Fue una montaña rusa para ellos, probablemente un poco más que para nosotros”, comentó. “Estamos aquí. Tenemos una misión. Simplemente estamos haciendo lo que hacemos todos los días, y cada día es interesante porque estamos en el espacio y es muy divertido.”
Wilmore y Williams esperaban estar fuera solo una semana cuando despegaron, en junio pasado, a bordo de la nueva cápsula Starliner de Boeing, que hacía su debut con tripulación después de años de retraso. La Starliner tuvo tantos problemas para llegar a la estación espacial que la Nasa resolvió que era demasiado peligroso transportar seres humanos y regresó vacía.
Su vuelta a casa se retrasó aún más por el tiempo adicional que se requería para completar la nueva cápsula de SpaceX que, supuestamente, debía trasladar a sus reemplazos.
El mes pasado, la Nasa anunció que la próxima tripulación viajaría en una cápsula usada, adelantando el despegue al 12 de marzo. Las dos tripulaciones pasarán aproximadamente una semana juntas a bordo de la estación espacial antes de que Wilmore y Williams partan con Nick Hague, de la Nasa, y Alexander Gorbunov, de la Agencia Espacial Rusa.
Wilmore y Williams —capitanes jubilados de la Marina y viajeros espaciales recurrentes— insistieron en que están sanos y que permanecen comprometidos con la misión el tiempo que sea necesario. Juntos, realizaron una caminata espacial en enero.
Llevarán trajes de vuelo genéricos de SpaceX para el viaje de regreso y no los trajes personalizados que llevan sus nombres, porque su viaje a casa en una cápsula Dragon no estaba planeado. Eso les parece bien, aunque Wilmore insinuó que podría usar una lapicera para escribir su nombre en su traje. “Solo somos Butch y Suni. Ahora, todo el mundo sabe quiénes somos", dijo Williams.