Murió el Papa Francisco y el mundo está en duelo. El argentino fue el primer Sumo Pontífice jesuita, el primero del hemisferio Sur, y el primer no europeo en siglos. Caracterizado por su inclinación a la humildad, su adhesión a la “opción por los pobres” (o con los pobres, como él eligió nombrar), y su condena a los abusos sexuales en la Iglesia, tras su fallecimiento inicia el proceso de selección de su sucesor: ¿quiénes son los candidatos a ocupar su lugar?
El cónclave es el sistema de elección papal que la Iglesia Católica sostiene desde 1858. Su dinámica, mayormente críptica, fue explorada recientemente en “Cónclave”, la película del alemán Edward Berger protagonizada por Ralph Fiennes que obtuvo ocho nominaciones a los últimos premios Oscar.
Nadie sabe realmente qué se dice ni qué ocurre en el tiempo que durante el proceso, durante el cual los cardenales participantes, provenientes de todo el mundo y menores de 80 años, se encuentran confinados en el Vaticano, bajo estricto juramento de secreto.
Según el nivel de consenso existente sobre la incumbencia de algún candidato, el cónclave puede durar un día o varias semanas, hasta llegar a un acuerdo mayoritario. Se sabe que son jornadas de intensas discusiones, intercambios de ideas, oración y mucho lobby. O como se diría en esta parte del mundo, rosca política. Diariamente, todos se encierran (literalmente) en la Capilla Sixtina a debatir quiénes son los mejores candidatos para liderar la Iglesia Católica.
Al final de la sesión, se vota de forma secreta. Si ninguno de los nominados logra dos tercios, se vuelve a votar. Esto puede continuar así durante largo tiempo. Desde la 34ª votación en adelante, sólo se vota entre los dos favoritos. Anecdóticamente, un cónclave del siglo XIX duró tres años, tiempo en el que fallecieron tres de los cardenales participantes. Desde 1900 en adelante, todos los cónclaves duraron no más de cuatro días. Francisco fue electo al segundo día.
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Quiénes son los candidatos a convertirse en el próximo Papa
Actualmente, hay 252 cardenales en el mundo, 138 de los cuales son elegibles para votar en el cónclave por su edad. De ese total, 110 fueron apuntados por Francisco para conformarlo. Este grupo es notablmenete más diverso que previos electores, con mayor cantidad de representantes de Asia, África y Latino América, reflejando el objetivo del fallecido Papa de dar cuenta de la presencia global de la Iglesia Católica.
Entre los candidatos africanos, hay algunos favoritos: el ganés Peter Turkson, ex líder del Pontificio Consejo para la Justicia y la Paz, y Fridolin Ambongo, actual Arzobispo de Kinshasa, capital de la República Democrática del Congo. Ambos son comprometidos conservadores que han sido voceros por la paz en sus países y podrían convertirse en el primer Papa negro de la historia. Sin embargo, el candidato más sólido del ala conservadora es el Cardenal húngaro Peter Erdo. Descrito por el medio Al Jazeera como un “tradicionalista” que ha servido como puente entre el Vaticano y los Cristianos Ortodoxos de Europa del Este.
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Otros posibles candidatos son el italiano Matteo Zuppi, Arzobispo de Bolonia, y Mario Grech, oriundo de Malta y secretario general del Sínodo de Obispos, una posición jerárquica dentro de la Iglesia Católica que lo puso muy cerca de Francisco.
Finalmente, no hay que dejar afuera al camerlengo irlandés Kevin Farrell, asignado por Francisco para ocupar un rol central en la transición: anunciar oficialmente su muerte, encargarse temporalmente de las finanzas y asuntos administrativos del Vaticano, y liderar el cónclave. En la ficción homónima de 2024, ese rol estuvo encarnado por Ralph Fiennes, protagonista de la cinta.
Cuándo empieza el cónclave para elegir el próximo Papa
Según las leyes episcopales, el cónclave de empezar entre 16 y 21 después de la muerte del Papa. Es decir que el proceso podría comenzar el 6 de mayo y el 12 de mayo.