Sol Pérez, modelo, conductora, abogada e influencer con más de 6 millones de seguidores, transita su séptimo mes de embarazo. En los últimos días fue blanco de críticas cuando subió a sus redes un video en la que se muestra durante su exigente entrenamiento físico. "Arrancando nuestra semana 30. Así me verán mientras me acompañen el cuerpo y las ganas", escribió. ¿Es riesgoso para la embarazada y el bebé entrenar de ese modo? ¿Se puede hacer actividad física intensa durante toda la gestación? Estas son algunas de las preguntas que surgieron.
La doctora Laura Pujadas, médica obstetra y puericultora, a cargo del servicio de Puericultura y del curso de preparto de Maternidad Oroño, habló con La Capital sobre los peligros y las ventajas de entrenar el cuerpo en esta etapa de la vida.
A diferencia de muchos de los comentarios que recibió Sol Pérez en su Instagram (casi dos mil mensajes), donde la atacan por ejercitarse de ese modo con su enorme panza, la profesional no se sorprendió y dijo: "Ella ayuda a romper el mito de que la embarazada tiene que evitar el ejercicio físico".
Inmediatamente, la médica aclaró: "A la decisión sobre qué tipo de actividad hay que hacer durante el embarazo la toma el obstetra, y es personal para cada mujer. El profesional la guiará de acuerdo a su edad, su estado físico, si tiene o no enfermedades previas, si ha tenido problemas en otros embarazos, y si viene entrenando o no, entre otros factores".
Respecto al caso de Sol Pérez, la obstetra señaló: "Es alguien que toda su vida realizó actividad física, lo que llamamos una mujer fitness (que está en muy buen estado físico), no se puso a levantar peso o hacer una rutina exigente de un día para el otro. Si ella tiene un embarazo de bajo riesgo y su médico se lo permite, está bien".
El movimiento durante el embarazo
Laura Pujadas comentó que en la actualidad son muchas las mujeres embarazadas que continúan con sus rutinas de actividad física, algo que años atrás no sucedía con esa frecuencia. "Sí, es común que las chicas que quedan embarazadas pregunten si pueden seguir yendo al gimnasio o a sus clases (de determinada disciplina). Pero si se trata de mujeres que no estaban entrenando es al revés: hay que incentivarlas para que hagan algo".
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"Una mujer sana con un embarazo sano debe realizar actividad física acorde a sus necesidades. El plan de entrenamiento o el tipo de actividad es personalizado y debe ser el adecuado en intensidad y frecuencia", señaló.
"Alguien que normalmente viene haciendo poca gimnasia puede empezar con pilates, yoga prenatal, caminatas, de intensidad moderada. Lo recomendable es tres o cuatro veces por semana", destacó la médica.
Las ventajas de hacer gimnasia
Están cada vez más demostradas científicamente las ventajas de la actividad física en todos los momentos de la vida. "Hacer ejercicios en el embarazo tiene ventajas".
La especialista comentó que hay beneficios en cuanto al sistema cardiovascular, se reduce el riesgo de hipertensión, de diabetes, de preeclampsia, el riesgo de subir mucho de peso, el estreñimiento; también favorece a que los músculos que se utilizan para el parto no estén tan rígidos", enumeró. "En definitiva, te sentís mejor en general, así que aconsejamos ejercicio físico de bajo impacto".
¿Cuándo no? "En embarazos de alto riesgo es diferente. Si la mujer ya tuvo otros embarazos donde nació algún bebé prematuro, si en este embarazo el bebé viene con dificultades de crecimiento, si la embarazada ya tiene hipertesión, si hay placenta previa, si es un embarazo múltiple, hay restricciones".
"Todo se debe charlar con el o la obstetra. Pero también hay algo que tiene que ver con el sentido común, que es muy importante: si nunca saliste a correr no vas a empezar con el embarazo, si no hacés actividad física intensa en forma regular no es el momento de hacerlo cuando te enterás que estás embarazada. Hay que escuchar mucho al cuerpo, y si durante la actividad física sentís molestias, contracciones, o algo que no está bien, hay que parar y consultar al médico", enfatizó.
La médica hizo hincapié en la actividad física, el embarazo y las altas temperaturas: "Es fundamental hidratarse mucho, antes, durante y después del ejercicio y yo no aconsejaría la actividad física en días de muchísimo calor en lugares no ventilados o en horarios no adecuados, eso no es saludable para las embarazadas ni para nadie".