Febrero arrancó con un calor intenso. Rosario está viviendo unos días agobiantes y las lluvias se hacen esperar. Según lo anticipado por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), durante la semana la temperatura llegará a los 39º.
La semana promete altas temperaturas pero también la llegada de las lluvias y un poco de alivio
Febrero arrancó con un calor intenso. Rosario está viviendo unos días agobiantes y las lluvias se hacen esperar. Según lo anticipado por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), durante la semana la temperatura llegará a los 39º.
Este lunes será el día más caluroso de la semana. La mínima estará en 25º y la máxima llegará a los 39º durante la tarde para bajar a 32º en la noche.
Lo cierto es que a pesar del agobio, por ahora no puede hablarse de ola de calor ya que para eso se necesitan tres días consecutivos de mínimas por arriba de 22,5º y máximas encima de 32,5º.
El martes hay un 40% de probabilidades de que llegue la lluvia. Sin embargo, las temperaturas seguirán altas: 31º de máxima y 24º de mínima. Finalmente, el miércoles, vendrán las tan ansiadas tormentas que empujarán un poco más hacia abajo el termómetro: 28º máxima y 21º de mínima. En ambos días se prevén ráfagas de hasta 50 km/h.
El jueves se espera que las lluvias cesen y que reaparezca el sol con alguna nubosidad. Se pronostica una máxima de 29º y una mínima de de 19º. Finalmente, el último día de la semana mantendrá la mínima pero la temperatura podrá llegar los 31º.
Se habla de ola de calor cuando se registran temperaturas anormalmente altas en una región durante un período sostenido, generalmente de al menos tres días consecutivos. Estas temperaturas deben superar un umbral definido para cada área, que varía según las características climáticas locales.
>>Leer más: Por qué Rosario no está bajo un domo de calor y qué esperar del tiempo para el fin de semana
Criterios para determinar una ola de calor
- Duración: Al menos tres días consecutivos de temperaturas elevadas.
- Temperaturas extremas: Los valores deben superar ciertos umbrales específicos, que dependen del promedio histórico de cada región. En zonas cálidas, las temperaturas deben estar muy por encima del promedio estacional. En lugares con climas más templados, incluso un leve aumento puede considerarse extremo.
- Índice de calor: Además de la temperatura, se considera la sensación térmica, que incluye factores como la humedad. En el país, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) monitorea las olas de calor y emite alertas según las temperaturas mínimas y máximas históricas de cada región. En Rosario, una ola de calor se considera cuando las temperaturas mínimas y máximas superan los 22,5 °C y 32,5 °C, respectivamente, durante tres días consecutivos o más.
Las olas de calor son eventos cada vez más comunes y severos, lo que pone en evidencia la necesidad de tomar medidas de prevención y adaptación ante el cambio climático.