En un contexto complejo y tras un crudo invierno, las intervenciones a personas en situación de calle aumentaron un 30% en lo que va del 2024. Así lo registra la Secretaría de Desarrollo Social y Hábitat con más de 6 mil solicitudes de atención entre enero y octubre. “Notamos contexto socioeconómico complejizado”, advirtió Nicolás Gianelloni, secretario del área.
En este contexto, Gianelloni marcó un salto en la cantidad de acciones coincidentes con otros indicadores como aperturas de carpetas médicas o llamados a la línea de la agencia de prevención de consumo problemático. “Desde mayo aumentó exponencialmente el número cuantitativo”, aseguró y recordó los datos del Operativo Invierno 2024, donde se asistió con alojamiento a más de 200 personas entre mayo y agosto.
“El número total de intervenciones mensuales puede ser coincidente o no con la cantidad de personas, porque una persona puede requerir dos o tres intervenciones”, aclaró el secretario.
El mayor número de intervenciones se dio en mayo con 1.067, el mismo mes que comenzó el Operativo Invierno. En cambio, en febrero fue el que menos se registraron con 366. En los diez meses calculados, la Dirección de Atención a personas en situación de calle, dependiente de la Secretaría de Desarrollo Social y Hábitat realizó 6.022 gestiones en 2024, contra 4.418 del mismo periodo del 2023. Es decir, se incrementó las tareas de asistencia en un 30% entre enero y octubre. Si solo se cuentan las gestiones en el marco del Operativo Invierno (abril-agosto), ese porcentaje se eleva al 41%.
>> Leer más: La atención de personas en situación de calle creció en Rosario un 60% entre enero y agosto
Consumos problemáticos
Las situaciones que se presentan en la Secretaría de Desarrollo Humano, tanto espontáneas o por derivación de las cuadrillas en calle, están atravesadas en un 90% por consumos problemáticos.
De ese número, la mitad acepta recibir ayuda de los dispositivos de la Agencia de Prevención de Consumo. “En algunos casos sostienen un proceso a largo plazo y en otros se da con una intermitencia, van uno dos veces y no van más”, lamentó Gianelloni. El resto “directamente no acepta ningún tipo de asistencia” por parte de los equipos municipales, completó.
El trabajo articulado entre la Secretaría de Desarrollo Social, la Dirección de Personas en situación de calle y la Agencia de Consumo, en estos casos, está dispuesto según la voluntad del paciente y el principio de autonomía de cada persona para poder aceptar o no una intervención.
El trabajo en calle
La Secretaría de Desarrollo Social y Hábitat, mediante la Dirección de Atención a personas en situación de calle, aborda desde tres caminos esta problemática.
En primera instancia, ingresan situaciones a través del Sistema Único de Atención 147, generando un reporte automático. A partir de allí, los “operadores de calle construyen su recorrida diaria para llegar al lugar”, contó Gianelloni. Aunque rápidamente aclaró que muchas veces se encuentran con la persona reportada y otras no. El 147 se posiciona como el primer canal de referencia para el trabajo con esta población.
El segundo punto es la atención espontánea. En este caso, la persona llega por sus propios medios a la Secretaría de Desarrollo Social y Hábitat, solicita una entrevista y explica cuál es su cuadro de situación. También sucede este proceso cuando una persona en situación de calle llega a uno de los refugios, ya que antes de registrarlo recibe atención “con operadores territoriales o con el coordinador para saber su condición socioeconómica y su situación personal, para definir si está en condiciones de sostener la estadía en el lugar”, detalló el funcionario.
Por último, existe la espontánea gestión. Este trabajo comprende gestiones anexas como a gestión del DNI, turnos en centro de salud o derivaciones. En contrapunto con los otros dos ítems, registra un aumento sostenido a partir de los últimos cinco meses.
Asistencia alimentaria
Solo entre mayo y septiembre, los excombatientes de Malvinas entregaron 350 raciones por día de lunes a viernes, aunque debieron incrementarlas en ocasiones, arrojando un total de 33.250 raciones brindadas en el período mayo-septiembre. Por su parte, los refugios entregaron un total de 26.600 raciones, contabilizando así la entrega de casi 60 mil raciones entre las recorridas y los refugios.