Una multiplicidad de factores ambientales, culturales y educativos convergen para explicar un dato que encendió el alerta en las autoridades sanitarias santafesinas: entre 2018 y 2023, los casos de sífilis aumentaron un 42 por ciento a nivel nacional y Santa Fe no está exenta. Frente a ello, desde el Estado provincial insistieron en ofrecer testeos y tratamientos gratuitos contra la enfermedad que se cura con penicilina. La actual gestión adquirió un millón de preservativos para su distribución en la red de salud y comprará 1,4 millón más en breve.
En el Día Mundial del Preservativo que se conmemora cada 13 de febrero, el director santafesino de Salud Sexual Integral, Facundo Peralta, trazó un balance de la gestión y puso sobre la mesa ante La Capital un dato alarmante: los casos de sífilis crecieron un 42 por ciento en el último lustro.
El millón de preservativos que la provincia licitó en agosto pasado ya está repartido a lo largo de los tres niveles del sistema provincial de salud y en pocas semanas se licitará la compra de otro 1,4 millón.
Como sistema de protección tiene una doble barrera: previene embarazos no deseados y frena contagios de enfermedades de transmisión sexual, como el VIH, gonorrea, Virus del Papiloma Humano (VPH) y sífilis.
Sífilis en aumento
Hay un alza como tendencia nacional que responde a un marco regional y global. Los datos epidemiológicos hablan de un incremento entre 2018 y 2023 del orden del 42 por ciento de incidencia. En ese lapso, se notificaron en la Argentina casi 130 mil pacientes.
"Vemos que desde hace mucho tiempo la cantidad de casos se incrementó. Algo falló en el medio, respuesta sanitaria, patrones de conducta en el cuidado, y este relajamiento se verán reflejados también hacia adelante", destacó Peralta para aclarar que en la estadística de casos de VIH "hay un amesetamiento. Por alguna razón la sífilis ha dejado de ser atendida, cuando era una infección estabilizada que había desaparecido del mapa". Una enfermedad que cuenta con métodos de detección tratamiento y cura que a diferencia del VIH se ha cronificado con medicamentos retrovirales.
"Mirando hacia atrás, el comportamiento de la población interpela a las carteras sanitarias a dar cuenta y poner en agenda de la sociedad el uso del preservativo, que es de libre distribución gratuita en todos los efectores de la salud provincial, al igual que los testeos", insistió Peralta.
Perfil
¿Hay una radiografía del paciente con sífilis? Para los especialistas ciertamente no. No está centralizada en un grupo etario, no tiene género definido, clase social; es decir que se comporta de manera transversal en todo el tejido social. Cada individuo vive su sexualidad en la plenitud que le parezca, pero un contacto sexual sin método de cuidado le abre una posibilidad cierta de infección.
"Por eso el llamado que hacemos en este contexto a la prevención usando el preservativo, y el fomento en la detección con testeos al menos una vez al año, como si fuese un control de laboratorio", remarcó el director.
La sífilis es una infección de transmisión sexual causada por la bacteria Treponema Pallidum. Se puede transmitir por contacto con úlceras infecciosas situadas en genitales, ano, recto, labios o la boca. Puede producir llagas indoloras en el lugar del contacto inicial, inflamación de los ganglios, erupción en la piel, fiebre y fatiga.
Se trata con penicilina o tetraciclina, pero no debe perderse de vista lo que se denomina la sífilis congénita, en la transmisión vertical de una embazada a su bebé en gestación. Los bebés que nacen con sífilis congénita pueden tener deformaciones óseas, anemia, agrandamiento del hígado y del bazo, ictericia, problemas en el cerebro o los nervios, meningitis, sarpullidos. Y su efecto puede ser letal.
El primer paciente argentino tratado fue en 1947 con el descubrimiento de la penicilina por Alexander Fleming, el tratamiento había sido introducido en 1943 en el país.
"En las décadas del 80 y 90 habían dejado de ser un problema epidemiológico, estaba controlado y en los 90 fue el apogeo del VIH que luego se amesetó a partir del 2000. Ahora, con esta alza, las estrategias contra la sífilis pasan por usar preservativo en las relaciones, testearse y tratarse porque tiene cura. Que la Argentina se haya retirado de la Organización Mundial de la Salud (OMS) no quita que las carteras provinciales puedan seguir vinculadas", subrayó Peralta para advertir: "Ponemos el signo de alarma, es un problema que existe y no lo ignoramos, se debe hablar de este tema y fomentar que tenemos todas las herramientas. Hay que poder revertir estos números que no son de pandemia, pero sí abordarla".
Poco uso
Según información relevada por AHF AIDS Healthcare Foundation de Argentina sólo el 14 por ciento de los pacientes relevados admite usar preservativo en todos sus encuentros íntimos, y la tendencia es aún más baja entre adolescentes (solo el 5 por ciento) y jóvenes en un 13 por ciento. En el país unas 139.000 personas conviven con VIH.