El Servicio Meteorológico Nacional encuadró a toda la provincia de Santa Fe bajo esta categoría. Cuándo bajan las temperaturas
Foto: Leonardo Vincenti / La Capital
El centro fue un horno este viernes y el calor volverá a ser protagonista en Rosario tras la renovación del alerta amarillo por altas temperaturas.
Tras un viernes muy complicado en cuanto a las temperaturas, Rosario se prepara para ingresar en una seguidilla de días con mucho calor. Este viernes, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) renovó el alerta amarillo por temperaturas extremas por calor y se espera que la sensación térmica esté muy cerca de los 40°.
En su reporte diario, el SMN anticipa que este sábado la temperatura mínima será de 20° y la máxima llegará a los 34°, aunque se estima que la sensación térmica sea mayor durante la jornada.
En este marco, recuerdan que es importante hidratarse, refrescar el cuerpo para prevenir golpes de calor, evitar comidas abundantes y no exponerse al sol. Como anticipó La Capital, el tan ansiado alivio llegará a partir de la noche del miércoles y provocará un brusco descenso térmico.
El nivel de alerta amarillo publicado por el SMN indica que las temperaturas que se registrarán pueden ser peligrosas, sobre todo para los grupos de riesgo, entre los que se encuentran niños y niñas, mayores de 65 años y personas con enfermedades crónicas.
Jorge Giometti, referente del Centro de Monitoreo Meteorológico y Climático (CMMC-SAT), dijo a La Capital que la temperatura subirá el fin de semana pero que habrá algunos intervalos nubosos y vientos del sector este. Y anticipó que "hasta mediados de la semana que viene no habrá precipitaciones, salvo en el norte provincial".
No obstante, consignó que en medio de este panorama empieza a jugar el factor de la sensación térmica. "La presión recuperó los niveles normales (1013 y 1014 hPa en verano) para la época, pero sigue en baja. Lo que genera ese clima agobiante es la humedad acumulada en el ambiente. Eso es precisamente la sensación térmica", comentó.
El municipio recordó que el golpe de calor afecta a personas de cualquier edad, aunque muy especialmente a mayores, ancianas, niños y niñas, por esto es importante priorizar la hidratación y la nutrición.
Los síntomas con los que se presenta son dolor de cabeza palpitante, náuseas, temperatura corporal elevada, confusión, pérdida de conciencia, respiración y pulso rápido y fuerte, y piel enrojecida, caliente y seca.
Ante cualquiera de estos síntomas es importante consultar al médico, trasladar al afectado o afectada a un lugar fresco y ventilado, ofrecerle agua, quitarle la ropa y mojar con agua fría el cuerpo. No se debe administrar medicamentos antifebriles, ni tampoco friccionar la piel con alcohol.
* Ofrecerles agua o jugos naturales en forma frecuente sin esperar a que los pidan.
* Ofrecer el pecho más seguido a los lactantes.
* No dar líquidos o comidas calientes o pesadas.
* Bañarlos o mojarles todo el cuerpo con frecuencia.
* Proponer actividades tranquilas y evitar juegos intensos.
* Evitar que transiten y jueguen expuestos al sol, menos aún en horario del mediodía o a la tarde temprano.
* Si deben transitar bajo el sol, ponerles sombreros y usar protectores solares.
* Vestirlos con ropa holgada, liviana, de algodón y colores claros.
* Nunca dejar a los niños dentro de un vehículo estacionado y cerrado.
* No consumir bebidas con alcohol ya que aumentan la temperatura corporal y las pérdidas de líquido.
* Aumentar el consumo de líquidos sin esperar a tener sed para mantener una hidratación adecuada.
* Evitar esfuerzos físicos o actividades deportivas exigentes.
* Sentarse y descansar cuando sientan mareos o fatiga.
* Evitar comidas abundantes, ingerir verduras y frutas.
* Para los ancianos y ancianas es importante que descansen en lugares frescos y ventilados, desabrigarlos y ofrecerles líquidos aunque no manifiesten sed.
Cabe destacar que en los casos de no estar afiliado a un servicio de emergencia privado se puede llamar al 107 desde donde se evaluará su situación.
Por otra parte, la comunicadora meteorólogica Vanessa Balchunas sostuvo: "Es fundamental saber que entramos en un período de influencia del viento del este, que dejará mañanas frescas y noches agradables hasta el sábado".
Eso hará que finalice enero y comience febrero con temperaturas elevadas, que podrían superar fácilmente los 35 y hasta 37 grados en localidades cercanas.
"La barrera de la sensación térmica puede dar qué hablar, principalmente entre sábado y martes, aunque el evento de ingreso de aire frío generará algunas tormentas y provocará el cambio de condiciones climáticas", apuntó.
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Balchunas sostuvo que "si bien febrero se caracteriza por ser el más húmedo en la zona, la humedad veraniega apareció esta semana, donde el vapor y la humedad se hicieron notar, a pesar de las escasas lluvias registradas".
Anticipó que "febrero tendrá estas características, pero habrá presencia de los primeros pulsos frescos, que van a propiciar que el viento del este llegue a esta zona y otorgue cierta mejoría nocturna para poder descansar".
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