Central: lejos de todo y Lequi sufre las primeras heridas de su gestión

El DT de Central, Matías Lequi, reconoció que “está a las claras que no nos está alcanzando” y fue autocrítico tras la derrota con Platense.

06:10 hs - Martes 24 de Septiembre de 2024

A Matías Lequi nadie le regaló nada y se ganó en buena ley la chance de ser el DT de la primera de Central. Hizo un gran trabajo en las inferiores auriazules, lo sostuvo en la reserva y también estuvo a la altura cuando de urgencia debió suceder a Miguel Angel Russo por decisión de la dirigencia de Arroyito. Es un hombre de la casa y está identificado con el club al ciento por ciento.

Pero está claro que en el fútbol “las gestiones pueden dejar cicatrices y heridas” en el trayecto de los proyectos. Hoy el Canalla atraviesa una mala racha con apenas un punto cosechado de los últimos nueve, lo que lo aleja cada vez más del objetivo de llegar a meterse en el plano internacional del año que viene, única misión de acá a fin de temporada. “Está a las claras que no nos está alcanzando”, fue la frase realista del DT tras la caída ante Platense del domingo por la noche.

  El actual técnico canalla arrancó su ciclo con todo, con dos victorias en fila, una de ellas que fue clave en el clásico ante Newell’s, y además hizo una llave competitiva y estuvo a la altura ante el duro Fortaleza de Brasil por la Sudamericana más allá de la eliminación.

Pero de vuelta a la Liga Profesional comenzó un bajón, con resultados adversos, un funcionamiento que no aparece y al equipo le cuesta imponer condiciones. Es una situación de insatisfacción que reconoció el propio DT tras la última caída ante Platense: “Hay que seguir trabajando, no conozco otra manera de salir adelante y siempre creyendo en una idea. Hay que terminar lo más arriba posible en las tablas”.

  La sinceridad del DT canalla es el primer paso para poder revertir rápido el presente flojo e irregular que atraviesa el equipo. También hay que reconocer que hay jugadores clave que están marginados por lesión y eso sin duda también influye. Pero para un equipo que viene de ser campeón hace menos de un año, que mantuvo a la mayoría del plantel y que jugó Sudamericana en este 2024, verlo ahora tan relegado en todas las tablas hace ruido y preocupa de cara a lo que viene.

  Hay que decir que tampoco Russo había podido sostener la efectividad y el rendimiento del equipo campeón de la temporada pasada y eso lo terminó alejando del cargo.

La autocrítica

Para Lequi desde el juego hoy Central no tiene la intensidad ni el manejo aceitado de la pelota que pretende y lo dijo tras la derrota con el Calamar. “Tenemos que presionar nosotros al rival y jugar lejos de nuestro arco, pero en los últimos partidos nos convierten antes de los diez minutos y así es complicado. La intensidad tiene que ser al cien y nos costó mucho”, asumió. La autocrítica del DT fue clara y no dejó espacio para las excusas.

  Y también se pronunció con sinceridad brutal sobre la jugada que pudo torcer la derrota y darle el empate al canalla en el final. “En el penal el designado era Nacho (Malcorra) y dentro de la cancha deciden los muchachos”. Esa fue la explicación del DT de por qué terminó ejecutando Maximiliano Lovera, cuyo remate dio en el palo y no se transformó en el empate auriazul. Malcorra venía de meter justo dos goles de penal ante Talleres, muy bien ejecutados, y sorprendió que el diez canalla, un experimentado, no sea el lanzador de la pena máxima, más allá de que nunca hay garantías de conversión.

Las reglas de juego

  En este contexto, Lequi ya como DT confirmado está lidiando con las reglas de juego del fútbol profesional, donde el resultado suele ser el único y el mejor aliado de los proyectos. Por ello de aquí en más la necesidad de volver al triunfo y no será por arte de magia, sino producto de solidificar al equipo en el fondo (recibió 5 goles en los últimos 3 partidos), darle una vuelta de tuerca a un mediocampo que luce desarticulado y ajustar la creación en las chances de gol.

  Todo en pos de dar un salto de calidad en la próxima fecha, cuando el próximo martes 1º de octubre el Canalla reciba nada menos que al líder Vélez en el Gigante. Una gran prueba para medir fuerzas y reaccionar ante el equipo que viene siendo el mejor de la Liga Profesional.

Lequi, de mayor a menor

Lequi arrancó bárbaro y en el debut venció de visitante a Gimnasia (LP) 1 a 0, luego logró imponerse a Newell’s en Arroyito por 1 a 0, acto seguido igualó con Fortaleza 1 a 1 en el Gigante por la Copa Sudamericana, después puso suplentes y cayó en la visita a Independiente por 1 a 0 y se dio el duro traspié en la revancha en Brasil, por 3 a 1, ante el equipo de Juan Pablo Vojvoda, que lo dejó afuera de la Sudamericana.

  Y en el último tramo comenzó ganando 1 a 0 a Atlético Tucumán en Arroyito, allí fue ratificado en el cargo, y sobrevino la polémica derrota 2 a 1 ante Boca en La Bombonera, el empate vibrante 2 a 2 con Talleres de local y la última caída por 1 a 0 ante Platense en Vicente López.

  Esta es la foja de servicios de Matías. Con tres victorias, cuatro derrotas y dos empates. El tema es que tras los dos triunfos iniciales luego apenas ganó uno (Tucumán) de los últimos siete juegos. Y de los últimos nueve puntos solo rescató uno (Talleres de local), que lo dejó muy relegado en la tabla de la Liga y en la acumulada en relación a la clasificación a la próxima Sudamericana. Por ello, el escenario indeseado en Arroyito tras ser campeón hace menos de un año y ahora lejos de todo.