A Central hay unos cuantos telones que ya se les bajaron, lo que habla del muy mal año que tuvo, pero en el tramo final de la temporada hay otro que se le levanta. Y lo que ocurrirá a partir de este miércoles en La Plata se presenta como la antesala de la obra que se piensa escribir en la próxima temporada, cuando sea el momento de subirse nuevamente al escenario con ínfulas de actor principal. El partido frente a Estudiantes marcará a fuego el inicio del ciclo Holan, un entrenador que asumió el compromiso frente a las cinco fechas que restan, a quien estos partidos le servirán para analizar, sacar conclusiones y en base a ello armar lo que se viene.
Hay una historia por contar en Central y la misma apunta a eso que vendrá. Es decir, las proclamas futbolísticas apuntan al futuro, pero es imposible no hacer referencia al pasado. Porque el hecho de que Holan haya desembarcado en Arroyito a cinco fechas del final de la Liga Profesional habla a las claras de todas esas cosas que se hicieron mal y atentaron contra las expectativas que se habían generado a principios de un año en el que se esperaba levantar la vara de lo hecho en 2023.
Nada de eso sucedió y por eso el manotazo de ahogado que tuvo que dar la comisión directiva canalla, dando por finalizado el proceso de Matías Lequi, quien tuvo que reemplazar al histórico Miguel Ángel Russo. Esto eso, hay un pasado al que hacer referencia para entender el presente.
Pero claro, por más necesario que sea comprender ese pasado, nadie en Central pretende hoy gastar energías en eso, sino que lo que se busca es hacer borrón y cuenta nueva y apuntarle de lleno a estos cinco partidos que no servirán sólo para cumplir.
RC2.jpg
Ignacio Malcorra será, como siempre, uno de los encargados en la generación de juego en Central.
Celina Mutti Lovera / La Capital
Holan lo necesita más que nadie
A Holan más que a nadie esta recta final del campeonato le será de suma utilidad. Con algo más de una semana de trabajo con el plantel, lo que el entrenador necesita como el agua, además de encontrar respuestas cuanto antes, es comenzar a sacar conclusiones sobre lo que vendrá.
>>Leer más: El Central de Holan iría con cambio de esquema y algunas apuestas fuertes
Y ya en este partido contra Estudiantes, en el que se supone habrá directivas que querrá que sean cumplidas (por mínimas que sean), el DT tendrá su primer banco de prueba.
La predisposición de tomar el equipo ahora encierra un dato positivo incontrastable y tiene que ver con el poco temor que le generó el desafío que la directiva auriazul puso frente a sus narices. También es sumamente objetivo el dato de que tomó las riendas de un equipo que futbolísticamente marchaba a la deriva, lo que le implicará un riesgo mayor.
¿Debería mostrar algo distinto el equipo? De arranque, Holan apuntará a que el Canalla se reencuentre con un mínimo de competitividad. Será el camino más corto para acomodar el fútbol de Central y que el armado de lo que viene resulte lo más sencillo posible.
Holan no será el gran responsable si la cosa no funciona de arranque porque el tiempo de trabajo aún es escaso, pero el sólo hecho de estar ya al frente del grupo es lo que empieza a echarle encima ciertas obligaciones. Por eso, cualquier cambio para bien que pueda plasmar el equipo será tomado como un avance.
RC3.jpg
Jaminton Campaz se moverá como siempre por izquierda, pero esta vez como extremo definido.
Celina Muti Lovera / La Capital
Un desafío extra para el Canalla
Encima, el desafío para el nuevo DT se verá potenciado porque no sólo el debut, sino el próximo partido también (ante Central Córdoba de Santiago del Estero) serán en condición de visitante. Es que si hay algo que a este Central de los últimos años le costó sobremanera fue obtener resultados fuera de Arroyito. Podría leerse que es mejor jugar sin la presión de los hinchas, al menos en estos primeros partidos en los que el nuevo entrenador querrá que ya algo cambie, pero la parada es brava. Ni Russo ni Lequi pudieron hacer de Central un equipo fuerte jugando afuera. Holan apuesta todo a patear ese tablero.
Por todo lo malo que se hizo hasta aquí es que en Central, a muy poco de que finalice el torneo, se abre un nuevo proceso. La vista allá a lo lejos apunta a echar los cimientos de cara al futuro, pero acomodar este presente convulsionado y para el olvido no le vendría nada mal al Canalla.