El Trinche Carlovich hubiera cumplido este sábado 79 años. Y su presencia sobrevoló la tarde del Gabino Sosa, encarnó en la camiseta número 10 de Central Córdoba, claro, que le dio a la pelota un destino brillante. Tomás Ramírez usó la 10, jugó de 10 y marcó tres golazos de 10. El se llevó todos los aplausos.
Cuando salió el numeroso público que se llevó al Gabino lo aplaudió de pie y al final, cuando los flashes del buen fútbol se habían apagado, demoró una eternidad en encarar los vestuarios, ducharse e irse a casa. Una gran cantidad de pibitos lo buscaron, le pidieron autógrafos y después fue la familia la que lo acaparó para las últimas fotos.
Tomás Ramírez tuvo una tarde de ensueño en el día indicado. Con tres golazos con su zurda mágica, como la que tenía el Trinche, todos de afuera del área, dos de tiro libre y uno con pelota en movimiento.
Una tarde de diez con Tomás Ramírez
“El triunfo es para el Trinche Carlovich, en el día de su cumple que también lo miró desde el cielo. Es un gran momento de Córdoba, por eso la gente explotó de alegría como también lo hicieron mis seres queridos”, dijo Tomás Ramírez, autor de tres goles y la gran figura del Matador en el triunfo ante Berazategui por 4 a 1.
Rodeado por sus seres queridos, Tomy Ramírez vivió una tarde soñada y tras el pitazo final del árbitro Cornejo, fue el centro de todos los saludos. No solo recibió las felicitaciones de sus compañeros sino de su rivales que lo sufrieron en tres oportunidades. Los árbitros, hinchas y seres queridos se asociaron a las felicitaciones por la excelente tarde en el Gabino.
El diez se llevó la pelota de recuerdo
Con la pelota en su poder, la gran figura del encuentro firmó autógrafos, accedió a todas las fotos y también se tomó unos minutos para charlar con Ovación. “Todo esto es increíble, estoy feliz por la gran victoria, por la alegría de la gente de Central Córdoba y por mis familiares que me brindaron el cariño, me apoyan y siempre están a mi lado”, confió Ramírez.
A la hora de referirse del momento del Matador, el 10 expresó: “Este momento de Córdoba es gracias al trabajo del día a día. El equipo va creciendo en el funcionamiento y los resultados están a la vista. El equipo no tiene un techo, todavía nos falta mucho para dar más. Debemos seguir con humildad, con los pies sobre la tierra y es paso a paso”.
Ramírez marcó tres goles espectaculares y a la hora de elegir la mejor conquista se quedó con el tercero. “Los tres goles fueron bárbaros pero me quedó con el tercero, porque fue de tiro libre, porque en la barrera había mucho jugadores de Berazategui y entró al palo del arquero que nada pudo hacer”, cerró.