El fiscal Guillermo Marijuán comenzó una investigación sobre el empresario Foster Gillett y su socio en Argentina, Guillermo Tofoni, por presunto lavado de dinero en numerosas transferencias de jugadores. Según trascendió, el propio fiscal fue quien ordenó medidas de prueba, que serán remitidas para que sean investigadas por un juez.
El magnate estadounidense, quien habría tenido intenciones de negociar con Newell's por Mateo Silvetti, llegó al fútbol argentino con el objetivo de financiar importantes proyectos con el presidente de Estudiantes, Juan Sebastián Verón, como aliado.
Si bien en un principio su introducción en el país generó debate y varias opiniones contrapuestas con respecto a si las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) podrían funcionar en el deporte local, desde las últimas semanas su nombre estuvo envuelto en polémicas.
Asimismo, River denunció tanto a Gillett como a Tofoni por “graves perjuicios al patrimonio" por el pase trunco del mediocampista del conjunto de Núñez Rodrigo Villagra al Pincha valuado en 10 millones de dólares, quien finalmente fue vendido al CSKA de Moscú por un monto muy inferior.
>>Leer más: Tapia sobre las Sociedades Anónimas Deportiva: "No es lo que queremos para nuestro fútbol"
Además de la controversia y escándalo con respecto a la transferencia del exjugador de Talleres, el empresario norteamericano será investigado por las negociaciones de Cristian Medina, Valentín Gómez (quien tuvo que regresar a Vélez luego de que Gillett no depositara el dinero para que sea nuevo refuerzo de Udinese de Italia) y Gonzalo Piovi.
Quién es el misterioso empresario
Foster es uno de los cuatro hijos de George Gillett, un reconocido empresario estadounidense que también se involucró en el negocio deportivo. De hecho, entre 2007 y 2010 la familia fue dueña de Liverpool, pero no todo terminó bien.
>>Leer más: La Justicia falló a favor de la AFA y le puso un freno a las sociedades anónimas
Con el fracaso en los Reds, la empresa vendió sus acciones al emporio Fenway Sports Group. Luego intentó con inversiones en hockey sobre hielo y en Nascar, la categoría más alta de competencia entre autos del mundo. “Creemos fuertemente en los deportes, en el negocio de los deportes. Yo, en particular, vivo y respiro este deporte. No hay nada que me haga más feliz que estar en un ambiente en el que pongo sonrisas en la cara de la gente“, sostuvo Foster tiempo atrás.
El flamante inversor de Estudiantes intentó en 2020 adquirir sin éxito el paquete accionista mayoritario del equipo escocés Heart of Midlothian Football Club. Luego, en 2022 estuvo muy cerca de comprar a Olympique de Lyon, aunque su primer golpe lo dio el año pasado cuando adquirió a Rampla Juniors Fútbol Club de Uruguay y lo convirtió en una SAD, que están permitidas en ese país.