Newell's tiene un nuevo paraguas protector: Cristian Fabbiani. El Ogro tuvo un paso meteórico y apasionante por el Parque en 2008, con un equipo protagonista como el que dirigía Fernando Gamboa, que se ganó el respeto y el aprecio de los hinchas rojinegros.
Esta noche de domingo ante Belgrano volverá al Coloso por primera vez como DT rojinegro y su presencia será el máximo foco de atención en el contexto de un equipo que necesita ganar sí o sí ante su gente, tras esa última foto durísima como fue la dolorosa y repetida caída en el clásico ante Central, que se llevó puesto a su antecesor Mariano Soso.
Tal vez Fabbiani puede ser el último DT de este mandato institucional de cuatro años de Ignacio Astore rumbo a lo que serán las elecciones de 2025. Sin ninguna duda, el Ogro tomó un fierro hirviendo y no se amilanó. Lo hizo a puro coraje y con la premisa de transformar a cada uno de sus jugadores en auténticos soldados de la causa rojinegra para el renacimiento futbolístico. Luego habrá tiempo para el brillo y confort.
El exdelantero sabe que está ante la primera gran oportunidad de su vida para demostrar sus condiciones de conductor de grupo y por ahora su gestión marcó un quiebre positivo con lo anterior que se vivía en el fútbol rojinegro. Se advierten señales de un equipo con coraje, amor propio y vergüenza deportiva para luchar cada pelota con enjundia, aunque todavía con muchos defectos en cuanto al retroceso, la gestación y el ataque sostenido. Pero al menos nadie negocia la entrega y el compromiso colectivo como principal pancarta de rebeldía.
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Este es el sello y el primer ladrillo laborioso que trata de imponer Fabbiani para construir su ciclo, que esta noche de domingo recibiendo a Belgrano tendrá su estreno como DT rojinegro en el Coloso, tras dos juegos de visitante (0-2 con Barracas Central y 2-1 frente a Atlético Tucumán).
El Ogro Fabbiani como jugador leproso
Pasaron poco más de 16 años desde que Fabbiani jugó su último partido en el Parque como futbolista leproso. Fue el 12 de diciembre de 2008, cuando por la 19º fecha de Apertura la Lepra venció 3 a 0 a Racing. Mientras que su último gol en el Coloso con la 9 rojinegra fue el 15 de noviembre de 2008, en el empate 3 a 3 ante San Lorenzo.
En total Fabbiani jugó 15 partidos en Newell’s en el Apertura 2008 y anotó 5 goles, cuando la Lepra terminó quinto y el campeón fue Boca.
Y ya luciendo la camiseta de River volvió al Parque el 3 de mayo de 2009, en el torneo Clausura, cuando Newell’s le ganó 1 a 0 a los millonarios. Y luego el 7 de noviembre de 2009, en el triunfo de River por 2 a 1. Desde allí corrió mucha agua bajo el puente hasta este presente como DT.
Ahora como DT
Ahora todo es diferente porque el Ogro ya no pisa la pelota como en el fútbol de salón, no pone el cuerpo con inteligencia ni pasa por arriba a los marcadores a pura potencia. Hoy está del otro lado de la línea de cal y su función es rearmar a Newell’s desde lo táctico y ser el “psicólogo” de un grupo que venía con el ánimo por el piso.
Por ahora logró cortar la sensación de apatía y desconcierto que inundaba al equipo. Newell’s era un perdedor serial. Con el Ogro se vieron signos de reacción incluso en la derrota con Barracas y luego logró cantar victoria en Tucumán.
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Newell's y lo que viene
Claro que aún está todo por hacer y Belgrano será una prueba de fuego ante un público que colmó su paciencia y vivió semanas anteriores agitadas en lo institucional. El Ogro tiene espalda para absorber la presión, pero él mejor que nadie sabe que la herencia recibida es muy pesada y que el margen de error es acotadísimo. Si hasta en una nota exclusiva con Ovación en la semana dijo que “quiero que Newell’s vuelva a la normalidad y empecemos a creer que saldremos adelante. Si gano un par de partido me quedo a vivir en Newell’s”. Esto refleja lo pésimo de todo lo anterior.
Esta noche de domingo será el regreso del Ogro al Coloso. La gente leprosa lo disfrutó en su paso breve como jugador y luego padeció su traumática salida. Ahora es otra historia. Que recién empezó a escribirse, pero el margen de maniobra es acotado y los resultados positivos serán el único aliado de su gestión.