Newell's necesitaba forjar otro válido gesto de ratificación en su sorprendente sendero de revitalización. Otro paso adelante. Otro guiño de complicidad en sentido positivo. Tras las victorias sobre Boca y Tigre, precisaba hilvanar otra cosecha gruesa para seguir prendido a la ilusión de poder llegar a los octavos de final del Apertura.
Por eso, el 0- 0 ante Argentinos Juniors, en el Coloso, no pudo transformarse en un aporte válido para esa lucha que está dando por alcanzar los playoffs del Apertura. Pero la unidad de reparto no le cae tan mal, teniendo cuenta el rival y el trámite. Quedan sólo tres fechas de la fase de grupos y la Lepra entra en esa recta con el horizonte despejado. En el parque Independencia todo continúa teñido de esperanzas y razonables expectativas, y el anhelo de alcanzar la próxima ronda siga sumando razones.
Newell’s llegó a esta etapa del torneo sin margen de maniobra. Rifó todo el crédito disponible muy temprano, en un arranque tormentoso en el que sólo sumó reveses y complicaciones. Por eso, en este tramo está obligado a protagonizar una reacción ante rivales de alto calibre, justo en la instancia más dificultosa del fixture.
Y otra vez estuvo a la altura de su desafío. Argentinos era una cruzada muy complicada, un rival de alta exigencia, pero los triunfos recientes ante adversarios encumbrados y de fuste, generaron un lógico marco de atrevimiento, que encendió y sigue entusiasmando a los hinchas rojinegros. En ese escenario, la igualdad cobra valor. La Lepra suma ahora seis compromisos sin perder y le sumó otro gesto positivo a este tablero de acción que está reconvirtiendo a pura entrega, a puro esfuerzo, comprendiendo sus limitaciones y exprimiendo al máximo su valentía y sus fortalezas.
Newell's arrancó más decidido
El conjunto leproso comenzó el pleito más decidido, presionando en campo rival, tratando de forzar el error del contrario. Mientras que Argentinos apostaba a las respuestas rápidas. Todo era con mucho vértigo, de ida y vuelta. A los 10’, Navas tapó una entrada muy peligrosa de Viveros por izquierda. Así, la visita mostró sus credenciales. En el dueño de casa, Herrera era el que siempre encontraba profundidad y se mostraba para terminar las jugadas más cerca del área rival.
A los 16’, Silvetti entró solo al área por derecha y despejó con lo justo Godoy al córner. Dos minutos después lo tuvo otra vez Silvetti tras otra trepada de Herrera. Era un duelo parejo, los dos mostraban los dientes, a su manera, con sus armas. A los 27’, le anularon un gol a Silvetti en una contra que inició Cocoliso. De a poco, Newell’s iba sumando algunos merecimientos más para la apertura del marcador.
Pero el Bicho también decía presente y, a los 26’, con un remate fuerte de Alan Rodríguez que sacó de manera magistral Navas marcó sus intenciones. A los 32’, Maroni, entrando al área, de tres dedos, no pudo quebrar la resistencia rival. Con gran intensidad, los dos se fueron al entretiempo con una igualdad en cero que repartía justicia, pero no revelaba la cantidad de emociones que los dos se encargaron de otorgarle al trámite.
Segundo tiempo similar
El complemento mostró rasgos similares. A los 5’, un tiro libre de Banega besó el travesaño. La visita seguía siendo la dueña de la pelota y apelaba a sus toques en velocidad para progresar. Pero todo se desvanecía cerca de las áreas. A los 25’, Jacob después de una larga contra mostró impericia para terminarla bien.
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En ese formato, Newell’s parecía ir encariñándose cada vez más con la igualdad y se manejaba en el campo de juego con esa cadencia. Entendiendo que le podían corresponder otro tipo de réditos y de dividendos, empezó a valorar cada vez más el reparto de unidades. Estando atento hasta el final, si el destino le guardaba algún tiro del final, que no llegó. Ni siquiera con la ayuda de los cambios que en esta oportunidad no gravitaron en el desarrollo.
A los 31’, Navas tuvo otra intervención mágica controlando un cabezazo de Herrera. Y eso puso en valor todavía más el calibre del rival. Con ese acento y esas lecturas cruzadas fueron transcurriendo los minutos finales. Newell’s pudo ganar mucho más, pero también pudo perder mucho más. Y bajo esos análisis se fue el partido. De esta manera, con una parda que fue tomando forma de recompensa apetecible a medida que fueron corriendo los minutos.
Newell’s superó otro obstáculo muy complicado, no perdió y sigue con sus rachas favorables en sintonía positiva. No es poco. Sigue con viento a favor.