Nadie va a descubrir nada si se dice que Franco Colapinto está esperando su oportunidad de volver a la Fórmula 1 en Alpine. Y que para ello necesita que el novato Jack Doohan no se destape. En la primera oportunidad pasó todo lo contrario, con una piña que lo dejó out de entrada.
Y más. Tampoco el experimentado Pierre Gasly estuvo a la altura. Cometió errores, como los de los giros finales que lo privaron de sumar los primeros puntos para Alpine. Flavio Briatore no habrá quedado nada conforme. Y a Colapinto le viene bien.
Colapinto estuvo todo el fin de semana en el box de Alpine, compartiendo el fin de semana de gran premio con todo el equipo, familiarizándose con el trabajo de ingenieros y mecánicos.
Ahí observó como Doohan desperdiciaba temprano su primera oportunidad de las pocas que dispondría para torcer una decisión que Briatore parece tener tomada: reemplazar al australiano por el argentino.
Un prólogo aceptable sin deslumbrar de Jack Doohan
No había sido malo lo de Doohan en las prácticas y la clasificación, en comparación con Gasly, al que superó en algunas tandas pero a la hora de la verdad quedó bastante atrás. Claro que porque su último intento en la Q2 se arruinó por la bandera amarilla del trompo de Lewis Hamilton.
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El 14° lugar de partida para su segundo GP en Fórmula 1 era aceptable para cualquiera con su experiencia, pero lejos de la necesidad de pegar el puño sobre la mesa para ganarse su amenazado lugar desde que firmó Colapinto.
Porque lo cierto es que a Doohan no le sirve solo con cumplir con lo esperable sino dar un plus. Y lejos de eso, el agua de la pista en el primer GP del año en su país, le jugó una muy mala pasada.
Debió ser un aviso ese insólito error del rookie Isack Hadjar, que hizo solo dos curvas en la vuelta previa, perdió el Racing Bulls y lo estrelló. Ese accidente que hizo romper en llanto al francés demoró 15 minutos la largada y cuando todo el mundo trató de salir limpio, en la curva 6 Doohan perdió solito el Alpine, que entró en trompo y lo golpeó mucho.
Todo el alerón trasero voló por los aires y había pedazos por todos lados, en un accidente que seguramente le restará un montón en la consideración de Briatore que ya avisó que no hay tiempo de sentimentalismos en la Fórmula 1.
Las palabras de Flavio Briatore
Inclusive, en una entrevista que dio a un medio francés antes de la carrera, Briatore elogió a Colapinto y avisó que un novato tiene para demostrar su valía en dos o tres carreras. Pues bien, Doohan ya cumplió dos.
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Es que el australiano debutó en el último GP de 2024, en Abu Dhabi, y pese a ser en una pista que conocía muy bien, estuvo siempre en el fondo, en un ritmo pobre respecto a Gasly, terminando 15° sin pena ni gloria.
En Australia, en la madrugada del domingo de Argentina, no tuvo opción de saber si habría mejorado o no. Si hasta su mismo papá, el múltiple campeón de los 500cc de motociclismo, Mick Doohan, meneó la cabeza hacia abajo al ver el accidente.
Fue una pésima noticia para Doohan este desenlace y una muy buena para Colapinto, que volverá a estar la próxima semana en el GP de China, donde el australiano seguramente volverá a estar al mando, con la presión extra de sus propios errores.
Un consuelo que no le sirve
Le puede servir de consuelo que unos segundos después fue el experimentado Carlos Sainz el que perdió solo el Williams y también lo terminó estampando. Como Fernando Alonso, bicampeón mundial, a mitad de carrera.
Pero Doohan debió estar en el otro pelotón, en el que estuvo el rookie, el pibito Kimi Antonelli, el único que terminó de los debutantes, ya que Gabriel Bortoletto terminó en piña, y el más experimentado Liam Lawson fue seguramente el peor piloto del fin de semana en el estreno al lado de Max Verstappen en Red Bull.
Tampoco Alpine salvó la ropa con Pierre Gasly, que clasificó mejor que Doohan y casi toda la carrera estuvo en los puntos. Hasta que el final la presión lo hizo irse al pasto, perder el auto, ser superado por las Ferrari y Oscar Piastri para ni siquiera sumar un puntito.
Nada es fácil en la Fórmula 1. Carlos Sainz llegó con ínfulas a Williams sustituyendo a Franco Colapinto y cometió un error de novato, más lógico en Doohan, cuyo asiento está amenazado por el argentino. Lawson y Hadjar le ganaron la pulseada en la estructura Red Bull y ambos decepcionaron en la primera oportunidad.
Un cabulero tomaría estas señales en serio. Pero se trata más bien de que Colapinto esté preparado como nunca por si todo llega antes de lo pensado. Doohan hizo en Australia lo suyo para que ello ocurra más temprano que tarde.