Uno de los tres condenados por el homicidio de Pimpi Caminos, antiguo jefe de la barra brava de Newell’s asesinado en 2010, quedó otra vez tras las rejas. Se trata de Emanuel Daniel “Ema” Suárez, quien fue acusado de planificar y participar de una balacera contra integrantes de la familia Tripi, sindicada como quienes pujan por el manejo del narcomenudeo en la zona de Parque Oeste.
Suárez fue imputado por el fiscal Pablo Socca de un hecho de abuso de armas agravado por la participación de un menor de edad y la portación del arma con la cual lo detuvieron. El hecho, que el fiscal contextualizó en una disputa por el control del narcomenudeo en el barrio, ocurrió el pasado 12 de febrero en el complejo de Cerrito y Pedro Lino Funes cuando varias personas dispararon contra la vivienda donde vive un adolescente de 17 años que cumple allí prisión domiciliaria por su participación en una balacera con un herido en abril del año pasado. La jueza Lorena Aronne le dictó la prisión preventiva por el plazo de ley de hasta dos años.
Clima enrarecido en Parque Oeste
Suárez fue detenido el pasado viernes 14 de febrero en el Fonavi Parque Oeste que por esos días atravesaba un clima de violencia con balaceras y denuncias cruzadas entre miembros de los grupos en disputa.
Varios días después, este jueves Socca acusó a Suárez por un hecho ocurrido minutos antes de las 2 de la mañana del 12 de febrero en Pedro Lino Funes al 2100. Según la imputación, el hombre de 37 años que cumplió una condena a seis años y medio por participar del crimen del Caminos planificó y participó de un ataque a tiros contra una vivienda en la que se encontraba un chico de 17 años miembro de la familia Tripi.
La acusación sostiene que Suárez participó del ataque junto con un adolescente de 15 años y al menos otros seis hombres que hasta el momento no fueron indentificados por los investigadores. La evidencia colectada indica que el frente del departamento en cuestión fue atacado con al menos diez disparos de pistola calibre 9 milímetros efectuados por el chico de 15 años. Acto seguido los agresores huyeron todos por Teniente Agneta hacia la casa de Suárez, también vecino de la zona.
La investigación de lo ocurrido asevera que el hecho se desencadenó en el marco de una disputa por la venta minorista de drogas y el control del territorio donde ejercerla, Parque Oeste, una barriada que en los últimos tiempos viene siendo escenario de hechos de violencia que tienen como trasfondo ese mismo contexto.
De hecho, luego del ataque atribuido a la gavilla que al parecer responde a Ema Suárez se registró otro hecho similar, durante la madrugada del día siguiente, cuando fueron a disparar contra la vivienda del imputado. Esa réplica ocurrió a metros del ataque anterior, en Teniente Agneta y Cerrito, y tuvo entre sus consecuencias heridas de arma de fuego sufridas por transeúntes que se encontraban circunstancialmente allí.
Luego de ese ataque contra Suárez el joven de la familia Tripi volvió a llamar a la policía para denunciar que Suárez y unas 20 personas habían llegado hasta su casa con intenciones de agredirlo. Al día siguiente fue detenido Suárez y desde este jueves seguirá preso por el plazo de ley.