Un joven de 23 años comenzó a ser juzgado por el crimen de Bruno Revoledo, un chico de 20 años que recibió varios disparos efectuados desde un auto cuando iba en moto por el cruce de Rouillón y Doctor Riva hace tres años. En el ataque también resultó gravemente herido quien iba como acompañante en la moto. Como presunto coautor de un homicidio consumado y otro en tentativa, la fiscal María de los Ángeles Granato solicitó para el acusado una condena a 18 años de prisión.
El juicio arrancó la mañana de este lunes ante el tribunal integrado por los jueces Eleonora Verón, Rafael Coria y Nicolás Vico Gimena. El acusado es Alan Yair Canteros, quien según fuentes del caso no tiene relación de parentesco con la familia ligada a la banda de Los Monos. El joven de 23 años afronta cargos por los delitos de homicidio agravado, en uno de los casos en grado de tentativa. En los alegatos de apertura del debate que sigue en el Centro de Justicia Penal, la Fiscalía solicitó bajo ese encuadre una condena a 18 años de prisión.
El crimen ocurrió el 27 de mayo de 2021 alrededor de las 18. Bruno Revoledo y su compañero Franco Manuel O. iban en una moto Honda Wave por calle Rouillón y al doblar hacia Doctor Riva se acercó un auto Ford Focus desde el que comenzaron a dispararles.
Según se planteó en el juicio, Canteros iba en el auto con otra persona y realizaron “múltiples disparos” hacia los motociclistas, que quedaron tendidos en el suelo mientras el auto se alejaba de la escena.
Cautela
Tras el ataque, algunos vecinos que asomaron a la puerta de sus casas sólo dijeron entonces a este diario haber escuchado los disparos, pero no aportaron mucho más sobre el crimen.
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Los dos chicos vivían muy cerca del lugar donde fueron atacados y ambos resultaron heridos. Revoledo sufrió dos heridas en la zona estomacal y una en un hombro. Franco Manuel O., de 22 años, fue alcanzado por dos disparos en la zona lumbar derecha y también fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde fue sometido a una cirugía. Revoledo también asistido en el Heca, donde sólo pudo resistir hasta la medianoche, cuando los médicos constataron su fallecimiento.
Sobre el joven fallecido trascendió en su momento que en abril de 2019 habían baleado su vivienda de la calle Doctor Riva y un año antes del crimen, en noviembre de 2020, había sido detenido por la policía mientras circulaba con un hombre en un auto con una escopeta calibre 16 cargada con dos cartuchos.