La ley de Ficha Limpia que tuvo media sanción este miércoles en la Cámara de Diputados dividió posiciones entre los diputados y diputadas nacionales por de Santa Fe.
El proyecto que prohíbe que personas condenadas en segunda instancia puedan ser candidatos dividió posiciones entre los legisladores oriundos de la provincia
La ley de Ficha Limpia que tuvo media sanción este miércoles en la Cámara de Diputados dividió posiciones entre los diputados y diputadas nacionales por de Santa Fe.
Entre los legisladores oriundos de la provincia fueron mayoría los que acompañaron el proyecto impulsado por el Poder Ejecutivo y sus aliados: doce votaron a favor, seis se manifestaron en contra y hubo un ausente.
Votaron a favor los tres libertarios: Romina Diez, principal referente de La Libertad Avanza en Santa Fe; Nicolás Mayoraz, que encabezará la lista de LLA para convencionales constituyentes, y Rocío Bonacci, hija de José Bonacci, presidente del partido Unite.
También apretaron el botón verde los cinco del PRO, con sus diferentes terminales políticas. Son Germana Figueroa Casas, alineada con la vicegobernadora Gisela Scaglia y que irá segunda en la nómina de convencionales de Unidos que encabeza el gobernador Maximiliano Pullaro, Alejandro Bongiovanni, Luciano Laspina, Verónica Razzini, Gabriel Chumpitaz y José Núñez. Estos últimos dos están ligados a la ministra de Seguridad Nacional Patricia Bullrich, se alejaron de la alianza provincial y piden pista en LLA.
Pese a su postura abiertamente opositora con el gobierno de Javier Milei, los socialistas Mónica Fein y Esteban Paulón, integrantes del bloque Encuentro Federal, votaron a favor.
Ficha Limpia es ley en Santa Fe y forma parte de las normas a las que Unidos, la coalición en la que el PS es uno de sus socios principales, quiere darle rango constitucional.
En tanto, también acompañó el proyecto la diputada radical Melina Giorgi. La expresidenta comunal de Fuentes responde al gobernador Pullaro e integra el bloque Democracia para Siempre, que nuclea a los legisladores referenciados en Martín Lousteau y Facundo Manes.
El radical Mario Barletta, que formó el monobloque Unidos en medio de la ruptura del radicalismo, no participó de la sesión.
Por su lado, todos los diputados del peronismo se pronunciaron en contra. Así lo hicieron el presidente del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez, que protagonizó un tenso cruce con ribetes maradonianos con el presidente de la Cámara, Martín Menem, las camporistas Florencia Carignano y Magalí Mastaler, y Eduardo Toniolli, del Movimiento Evita.
El perottista Roberto Mirabella, que rompió con el bloque de UxP y formó su propia bancada, a la que llamó Defendamos Santa Fe, también votó en contra.
La iniciativa fue sancionada con 144 votos a favor, 98 en contra y 2 abstenciones.
La iniciativa busca que los dirigentes condenados en segunda instancia por la Justicia por hechos de corrupción no puedan ser candidatos a cargos legislativos o ejecutivos.
El proyecto de Ficha Limpia, impulsado inicialmente por el PRO y reformulado por el oficialismo, se convirtió ahora en una iniciativa emblema para el gobierno de Javier Milei, que a fines del año pasado lo hizo naufragar en Diputados con el argumento de que parecía estar dirigido solamente a Cristina Kirchner con la única finalidad de proscribirla.
A pesar de algunos cambios, la palabra “proscripción” sobrevoló casi todo el debate, sobre todo desde los discursos que bajaban del bloque peronista.
Los diputados de UxP hablaron de la larga tradición de “proscripciones” que afectó al peronismo y ubicaron a Cristina en ese intento. Justamente ayer, mientras se debatía Ficha Limpia, aparecieron pasacalles en Rosario con la leyenda “Cristina es presente” como parte de una movida que se replicó en casi todo el país.
Los diputados del PRO y LLA rechazaron esa acusación e insistieron en que el proyecto tiene la finalidad de limpiar a la política de corruptos, sea Cristina o cualquier otro dirigente que cometa un ilícito. La expresidenta tiene condena firme, y en dos instancias, por la causa Vialidad y la ley de Ficha Limpia le impide ser presentarse como candidata en las próximas elecciones legislativas.
Tras la media sanción en Diputados, el proyecto pasa al Senado. Allí el trámite es más complejo para el oficialismo, porque Unión por la Patria cuenta con 34 senadores. Con sólo tres senadores más lograría bloquear la iniciativa, que requiere 37 votos, la mitad más uno de los miembros totales de la Cámara, para convertirse en ley.