El gobierno nacional analiza implementar un nuevo sistema para las conferencias de prensa de Manuel Adorni en Casa Rosada que permitiría a los ciudadanos decidir qué periodistas pueden formular preguntas. Sería una especie de “Gran Hermano periodístico”, según palabras del propio funcionario.
“La idea, desde el comienzo de mi gestión, es que la sala de prensa sea cada vez más profesional”, comenzó el portavoz su exposición. “Para mí es importante que se escuche cuando hablan o que salgan bien en cámara. Dentro de eso, creo que tiene que estar la libertad de expresión, la libertad de prensa en todo su esplendor”, dijo el vocero presidencial.
La iniciativa consiste en abrir un mecanismo de votación en línea donde el público elegiría a los medios y comunicadores que participarían en las ruedas de prensa. Esta modalidad reemplazaría el actual sistema, donde los voceros gubernamentales seleccionan a los periodistas que intervienen. Desde el Ejecutivo sostienen que el objetivo es "transparentar el proceso y dar más participación a la ciudadanía".
El tema surgió a partir de una pregunta que apuntó a una noticia que generó controversia en las últimas horas, que es la posible implementación de un “botón muteador” para regular las intervenciones de los periodistas. Sobre esto, el vocero explicó: “En caso de hacerlo, es simplemente para evitar, por ejemplo, que le arranquen el micrófono de la mano a gente que trabaja en Casa Rosada. Prefiero yo mutearlos y se terminó el problema”.
“Estoy buscando un esquema en el que la gente pueda decidir quién se va y quién se queda, un Gran Hermano periodístico”, señaló.
Nuevo embate contra la prensa
La semana pasada el Foro de Periodismo Argentino (Fopea) expresó su preocupación por las dificultades que enfrentó la prensa a la hora de realizar una cobertura adecuada del discurso presidencial de apertura de las sesiones parlamentarias.
Durante esa semana, FOPEA y otras organizaciones habían señalado los cambios dispuestos para los espacios asignados a periodistas y reporteros gráficos en el Congreso. En lugar de atender esos reclamos, las autoridades nacionales implementaron modificaciones que resultaron en áreas más reducidas y con vistas incómodas para los periodistas, dificultando su cobertura dentro del recinto.
Embed - https://publish.twitter.com/oembed?url=https://x.com/FOPEA/status/1895173012611309723&partner=&hide_thread=false
Estos problemas se vieron aún más agravados por la actitud hostil de la seguridad al término del discurso presidencial. A los periodistas se les impidió moverse para seguir el desarrollo de la salida del Presidente. Lejos de reconocer alguna responsabilidad por lo ocurrido, el Presidente utilizó sus redes sociales para desacreditar al periodismo, llamándolo “coimero” y “mentiroso” en relación con el incidente entre el diputado Facundo Manes y el asesor Santiago Caputo.
“Los funcionarios públicos tienen la responsabilidad de facilitar respuestas y explicaciones a la sociedad. Sin embargo, cuando no se garantizan las condiciones mínimas para una cobertura periodística adecuada, se dificulta el acceso a la información pública”, sustuvo el comunicado de Fopea, que insistió en la necesidad de que las autoridades nacionales aseguren un trato respetuoso hacia el periodismo, ya que solo así se puede mantener la libertad de expresión y de prensa en su máxima amplitud.