El Senado de la Nación congeló los sueldos de los legisladores luego de la polémica que se generó por los aumentos en las dietas. Pero el congelamiento vence el último día de este 2024, por lo que los senadores deberían sesionar si pretenden prorrogar la medida; de lo contrario, en enero de 2025 pasarían a cobrar unos 9,5 millones de pesos brutos mensuales.
Así lo confirmaron fuentes de la Cámara alta, que se adelantaron a lo que podría ocurrir en el Senado después de que la vicepresidenta, Victoria Villarruel, intentara que el debate por las dietas se incluyera en el temario de la semana pasada, sin éxito. "Espero que los senadores lo traten, porque no soy senadora, no soy quien toma las decisiones", argumentó entonces, y pidió a los senadores que estén "a la altura de las circunstancias", ya que "las dietas deben estar congeladas", aseveró.
En abril pasado, el Senado aprobó un enganche con la paritaria de los trabajadores del Congreso. De ese modo, cada ajuste salarial impactaría de igual manera en ambos sectores. Incluyendo dieta, gastos de representación, desarraigo y descuentos, los sueldos de la Cámara alta pasaron de $1.900.000 a $7.000.000.
El aumento de agosto de los trabajadores del Congreso disparó los sueldos de los legisladores por encima de los 9 millones de pesos, pero la polémica que generó los llevó a suspender el llamado sistema de módulos y congelar las dietas con respecto a lo que percibían en abril, es decir, $4,5 millones.
Si se añaden las últimas subas y al vencer el congelamiento el 31 de diciembre, desde enero los senadores pasarían a cobrar más de $9,5 millones.
Mientras tanto, Diputados no aplica el enganche con los trabajadores del Congreso, con lo que sus dietas se mantienen en $3.497.958 más $625.000 por desarraigo.