De los desfiles de samba en Río a las comparsas en Salvador, el evento es una invitación a vivir una fiesta única, con miles de personas unidas por la música.
El carnaval de Brasil es famosos por su música y la cantidad de gente que convoca en las distintas ciudades que lo realizan.
Ya sea en el lujo de los desfiles de las escuelas de samba, en las comparsas callejeras o siguiendo a los tríos eléctricos, el Carnaval brasileño es una invitación a vivir una de las mejores experiencias de vida. El 2025 comenzó y el pueblo brasileño ya está latiendo a un ritmo diferente. El Carnaval de Brasil está llegando para transformar calles, plazas y sambódromos en escenarios de celebración, alegría y diversidad.
Es la época del año en la que los disfraces brillan y las multitudes se unen para festejar la vida al son de marchas, ritmos regionales y sambas. Entre el 1 y el 4 de marzo, la energía contagiosa de esta fiesta atraerá a millones de personas de todo el mundo para vivir uno de los espectáculos más grandes del planeta.
De norte a sur, cada ciudad imprime su identidad única al carnaval. Ya sea en los grandiosos desfiles de las escuelas de samba o en los bloques callejeros que arrastran multitudes, el espíritu carnavalesco es una verdadera manifestación del alma brasileña.
Río de Janeiro (la Ciudad Maravillosa) es el epicentro de uno de los carnavales más icónicos. El Sambódromo Marquês de Sapucaí es el escenario oficial para el desfile anual de las escuelas de samba cariocas. Con carrozas grandiosas, disfraces lujosos, coreografías y mucha música, las escuelas de samba desfilan durante dos noches, atrayendo la atención nacional e internacional.
Y eso no es todo: el Carnaval callejero carioca es reconocido por los Guinness World Records como el mayor del mundo, ya que atrae cerca de dos millones de personas por día para acompañar a cientos de comparsas, que se apoderan de la ciudad en una explosión de música y colores. Entre los más famosos, están el Cordão da Bola Preta, el Simpatia é Quase Amor, la Banda de Ipanema, el Bloco da Favorita y el Bloco da Preta.
El Carnaval carioca es una invitación para vivir momentos inolvidables en la Ciudad Maravillosa.
Imagine que está bailando detrás de un trío eléctrico, sienta la vibración de los tambores y la contagiosa alegría de personas de todos los rincones del mundo. Prepárese, porque el Carnaval de Salvador ofrece seis días de mucha diversión, animación, diversidad musical y felicidad. Es tal la magnitud de esta fiesta que ha estado en los Guinness World Records como el mayor carnaval callejero del mundo, reuniendo a 16,5 millones de personas.
Durante los días de fiesta, la ciudad se transforma en un enorme escenario a cielo abierto, con bloques, tríos eléctricos (camiones adaptados con una plataforma para el show de los músicos y con altavoces potentes) y palcos que celebran al son de axé, samba, pagode y muchos otros ritmos musicales. La programación se divide en varios circuitos, y los principales son Barra-Ondina, Campo Grande y Pelourinho. Por estos recorridos circulan los tríos eléctricos de artistas brasileños consagrados por el carnaval, como Gilberto Gil, Ivete Sangalo, Bell Marques, Durval Lelys y Daniela Mercury, arrastrando multitudes por las calles de Salvador.
Salvador es sinónimo de axé, calor humano y una experiencia que conecta a personas de todas partes del mundo al ritmo de Bahía. El primer consejo para los turistas que visitan por primera vez el Carnaval bahiano es que elijan cómo quieren disfrutar de esta celebración: ya sea en medio de la fiesta, siguiendo las comparsas en la calle, o bien en uno de los palcos que ofrecen confort, gastronomía y una vista privilegiada de la fiesta.
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El Carnaval de Recife, capital del estado de Pernambuco, es una fiesta que hay que vivir al menos una vez en la vida. Con calles llenas de colores, música y sonrisas por todos lados, la fiesta comienza en las primeras horas del sábado con el famoso Galo da Madrugada, considerado el movimiento carnavalesco callejero más grande del mundo. Es imposible no emocionarse al presenciar el frevo (ritmo típico de Pernambuco) invadiendo las calles, con sus sombrillas de colores y el ritmo vibrante de las orquestas con percusión y vientos que no dejan a nadie quieto.
En el centro antiguo de la ciudad, conocido como Marco Zero, es posible encontrar grandes espectáculos y una vibra increíble mientras que, en los polos repartidos por la ciudad, hay presentaciones de maracatu y ciranda (estilos de música y danza tradicionales de Brasil) e incluso comparsas líricas llenas de poesía y tradición. Es una mezcla de sonidos y culturas que solo Recife puede ofrecer.
En medio de toda esta fiesta, puede sentirse la esencia del pueblo pernambucano: cálido, acogedor y lleno de alegría. Es una experiencia única.
Muy cerca de Recife, la ciudad de Olinda cautiva con su Carnaval, considerado Patrimonio Cultural de Brasil. Es una experiencia mágica y llena de vida, que se da en medio de subidas y bajadas por las históricas colinas de la ciudad, de arquitectura colonial y vistas deslumbrantes, y llega hasta el turquesa del Atlántico. Acompañadas por orquestas de frevo que tocan sin parar o al son de otros ritmos como maracatu, las comparsas callejeras rebosan tradición, creatividad en los disfraces del público y una energía contagiosa que hace que nadie pueda quedarse inmóvil.
Los icónicos muñecos gigantes son la gran carta de presentación internacional del Carnaval de Olinda. Es imposible no encantarse al ver figuras coloridas y caricaturescas de famosos de Brasil y del exterior bailando entre las multitudes. Olinda es más que un Carnaval: es una inmersión cultural inolvidable. Salir por las calles de Olinda, mezclarse entre los diversos “blocos” y ser parte de la gran fiesta de Brasil es una experiencia única en un destino con amplia gastronomía y servicios hoteleros.
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Belo Horizonte, la capital del estado de Minas Gerais, ha ido ganando espacio como uno de los principales destinos carnavalescos de Brasil. Con comparsas callejeras para todos los gustos, desde las más tradicionales hasta las más creativas, la ciudad se convierte en un centro de alegría y diversión.
Y el verdadero encanto de este carnaval está en su diversidad. Se puede disfrutar de las comparsas callejeras llenas de gente o buscar algo más tranquilo, en barrios donde la fiesta es más pequeña y relajada. Entre los “blocos” más famosos, están Então, Brilha!, Juventude Bronzeada, Funk You, Havayanas Usadas, Quando Come Se Lambuza y Os Baianeiros, que atraen multitudes con sus colores, energía y animación. Para aquellos que buscan música de calidad, los escenarios repartidos por la ciudad presentan artistas increíbles, asegurando que la música nunca se detenga.
Un consejo: Si estás en Minas Gerais en esta época del año, también vale la pena explorar otras ciudades carnavalescas, como las joyas arquitectónicas coloniales Diamantina y Ouro Preto. En Diamantina, el Carnaval es animado por bandas que tocan en las plazas históricas, mientras los cerros se llenan de público disfrazado y felicidad. En Ouro Preto, la fiesta tiene un clima más joven, con comparsas animadas que hacen vibrar las calles históricas.
Cada uno de estos destinos ofrece una experiencia única, pero con la misma esencia minera de recibir con calidez y celebrar con el corazón.
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Por Lucas Ameriso