En uno de los destinos más atractivos y pintorescos del valle de Traslasierra, San Javier, se destaca la Posada Rural La Matilde que combina confort, naturaleza y sostenibilidad para una experiencia sensorial única.
En la geografía del valle, con el telón de fondo de las Altas Cumbres, se destaca en San Javier la Posada Rural La Matilde, con todo el confort y la hospitalidad
En uno de los destinos más atractivos y pintorescos del valle de Traslasierra, San Javier, se destaca la Posada Rural La Matilde que combina confort, naturaleza y sostenibilidad para una experiencia sensorial única.
Más que una simple estadía, La Matilde ofrece una experiencia plena de hospitalidad, calidez, atención cercana y un “como estar en casa”. Esta posada forma parte de un corredor que se caracteriza por poseer un microclima saludable debido a la alta concentración de iones negativos en el aire. Esta particularidad aporta beneficios como la reducción del estrés, la mejora de la circulación sanguínea y la respiración, así como un descanso más reparador.
La posada ofrece diez habitaciones dobles (ocho clásicas de 48 m2 y dos superiores de 52 m2) acogedoras y equipadas con todos los detalles para garantizar el confort de los huéspedes.
Amplias galerías, piscina al aire libre con solárium, huerta orgánica y biodinámica, invernadero de hongos gírgolas, espacio de oración y rincón de las flores forman parte de la propuesta.
Este verano, la posada ofrece una amplia gama de actividades, entre las cuales se destaca la Experiencia Rural, donde los huéspedes se conectan con los caballos y aprecian su sensibilidad. Es un recorrido guiado por los viñedos, lagunas y el bosque nativo. El encuentro finaliza en el deck, con el sol del atardecer tiñendo los cerros.
Atardeceres y vinos es una de las atracciones principales. Un recorrido por la historia, técnicas de vinificación orgánica y biodinámica y cata de los vinos de Finca La Matilde. Actualmente se elaboran 12.000 botellas por año, 100 % biodinámicos: el viñedo productivo –Malbec, Cabernet Sauvignon y Tannat– ocupa 3 hectáreas y las plantas nuevas –Cabernet Franc, Viognier, Roussanne y Sauvignon Blanc– otras 3. Finaliza el encuentro en el deck con el sol del atardecer entre los cerros.
Además, ofrece otras actividades para disfrutar del entorno, como arquería, yoga, masajes, lectura de tarot y caminatas guiadas a la montaña.
La gastronomía es un pilar fundamental de la experiencia en La Matilde, con una propuesta que utiliza ingredientes frescos de la huerta y de productores locales. Los platos enfatizan los sabores originales, combinando productos de alta calidad nutricional, con una carta variada de reconocido prestigio y la calidez del piano en vivo cada sábado por la noche.
Un verano para redescubrir San Javier: ya sea disfrutando de sus cómodas habitaciones, participando en actividades o degustando los sabores de DeAdobe, Posada Rural La Matilde invita a vivir una experiencia inolvidable. En este lugar paradisíaco, el tiempo se detiene, la naturaleza se convierte en protagonista y cada detalle inspira calma y conexión.